Niñez valiente cambia juguetes de guerra por sueños de paz en Guadalupe

Guadalupe, Zac.- Ayer por la tarde, en el corazón de la colonia La Comarca, se vivió una jornada que fue mucho más que una simple entrega de juguetes: fue un acto de conciencia, una apuesta por la transformación social desde la infancia.

Como parte de las actividades de las Brigadas de Bienestar, se llevó a cabo un emotivo y simbólico Canje de Juguetes Bélicos por Juguetes de Paz, donde más de 50 niñas y niños acudieron con pistolas, rifles y espadas de plástico para cambiarlos por pelotas, rompecabezas, libros, muñecos educativos y bicicletas.

Una decisión que, aunque sencilla a la vista, representa un poderoso mensaje contra la normalización de la violencia en las nuevas generaciones.

Padres y madres de familia participaron activamente, muchos de ellos sorprendidos por el entusiasmo con el que sus hijos entregaban sus antiguos juguetes bélicos. “Yo quiero uno de los que enseñan cosas, de los que ayudan a pensar”, comentó un pequeño mientras entregaba una metralleta de plástico.

Esta acción fue posible gracias a la gestión del Secretario General de Gobierno, Rodrigo Reyes Mugüerza, quien ha impulsado firmemente estrategias enfocadas en la prevención de la violencia y el fortalecimiento del tejido social desde una visión humanista. Su respaldo fue fundamental para que esta iniciativa se materializara con éxito en una de las zonas más pobladas de Guadalupe, como lo ha indicado puntualmente el gobernador David Monreal Ávila.

Asimismo, se agradeció el invaluable apoyo de la Sra. Sara Hernández de Monreal, cuya visión ha sido clave para llevar este tipo de acciones a las comunidades, donde muchas veces los únicos juguetes accesibles son los que replican la violencia.

“No permitamos que nuestras hijas e hijos normalicen la violencia. Construyamos desde casa sociedades de paz y bienestar”, declaró la Sra. Hernández de Monreal durante su intervención en la jornada.

El evento fue acompañado de talleres lúdicos, cuentacuentos y actividades recreativas que reforzaron el mensaje del día: la niñez merece crecer rodeada de amor, juego y esperanza, no de réplicas de violencia.

Porque cambiar un juguete también puede ser el primer paso para cambiar un destino.